Los gatos necesitan rascar, principalmente, por cuatro motivos: afilar sus garras, para marcar territorio, por simple goce y disfrute y, por último, por aburrimiento.

Para un gato callejero no hay problemas para encontrar un árbol y saciar sus ganas de rascar las uñas pero cuando un gato se encuentra en nuestro hogar nunca sabemos que parte del mobiliario puede convertirse en su víctima favorita. Este es uno de los motivos principales para pensar en adquirir un árbol rascador para gatos, que nuestro minino tenga un lugar de calidad donde rascarse a la vez que salvamos los muebles de sus garras mininas.

Un árbol rascador puede, además, ofrecer otras prestaciones que pueden ser muy útiles tanto para nosotros como para los gatos, llegando a poder ser un pequeño parque de atracciones para nuestro minino. Siempre dependiendo del espacio que tengamos en casa, podemos adquirir desde unos rascadores bastantes simples y pequeños, como unas torres enormes con zona de ocio y descanso, a la vez que zonas para rascar las uñas.

Al final de esta entrada os hemos dejado unas sugerencias de los que consideramos que son los mejores y más económicos árboles que encontramos en el mercado hoy en día, todos con su respectiva reseña para poder responder todas las dudas posibles.